Madre hay una sola by Giamportone’s

Seguramente ya empezaste a recibir tanto en tu cuenta de mail como en las publicidades en redes súper promos que prometen mamás felices. Sí, aunque no lo creamos, ya casi es octubre y el “Día de la Madre” está a la vuelta de la esquina. Al parecer es un gran evento comercial donde la clave […]


Seguramente ya empezaste a recibir tanto en tu cuenta de
mail como en las publicidades en redes súper promos que prometen mamás felices.
Sí, aunque no lo creamos, ya casi es octubre y el “Día de la Madre” está a la vuelta
de la esquina.





Al parecer es un gran evento comercial donde la clave es
competir por el mejor regalo. Pero, ¿quién gana en este día? Gran pregunta.
Nuestra respuesta es que te tomes un momento para pensar en algo realmente
especial, pero que la cantidad de dinero invertida no sea el foco del asunto.
Que lo trascendente sea el recuerdo que quedará de este día en la memoria de
sus protagonistas.





Para que haya mamás tiene que haber hijos, es por ello que
hablo en plural y hablo de experiencia. Intentemos sorprender con algo casero,
hecho con las propias manos, con cariño, pensado especialmente para la persona.





Compartir es una palabra muy linda y el tiempo mejor
invertido será este último, el que hará tan feliz a la mujer que tanto te dio.
En un mundo moderno y  sin tiempo, ese es
el mejor de los regalos. Una comida, un café con su torta favorita, un día de
spa o una escapada a Potrerillos serán especiales si además de dedicarles toda
tu atención dejamos de lado el celular y nos conectamos con la persona que nos
dio la vida.