Siete Cocinas, restó recomendado del mes de agosto
Siete Cocinas se llama el restaurante de Pablo del Río, ubicado en una antigua casona mendocina de 1917 en la esquina de Mitre y San Lorenzo de Ciudad. Desde sus comienzo este restó apunto a la cocina de alta gama con un concepto basado en las siete regiones gastronómicas del país: NOA, Litoral, Cuyo, Pampa, Metropolitana, Patagonia Andina y Mar Argentino, con una carta abierta en un lugar que busca una simplicidad desprovista de elementos innecesarios con una presentación honesta de la esencia de sabores y aromas de cada ingrediente, acercándonos la cultura y costumbres argentinas.
A partir de agosto, Del Rio hace evolucionar su restó para llevarlo a otro nivel y transformar el concepto de la carta abierta a un menú experiencia donde justamente potencia este concepto de la vivencia gastronómica en su conjunto. El restó solo ofrece dos opciones: “Cuatro Regiones” o “Siete Regiones”. El primero tiene cuatro pasos, cada una correspondiente a una región argentina por un valor de $320 p/p y con la opción de elegir el principal, mientras que el segundo incluye las siete regiones, haciendo un viaje completo por la gastronomía del país. Comienza con un pacú de misiones curado y mbeyu del Litoral; Arvejas estofadas, criolla y huevo orgánico de la Zona Metropolitina; charcuterie y conejo de Cuyo, cuadril asado y su guiso de lentejas de La Pampa, chivo al horno de barro de Cuyo, un postre de la Patagonia y un alfeñique helado con amaranto jujeño del NOA que invita a jugar y divertirse con la modalidad de preparado en la mesa. Este menú cuesta $490 por persona con la opción del maridaje que significan $205 más y en ésta oportunidad están acompañados por una selección de vinos del Valle de Uco.
Es la evolución de una cocina que primero expuso todas sus regiones a través de su gastronomía y posteriormente dio un salto para ofrecer un producto redondo, compacto que sube la apuesta al comensal incitándolo a focalizar en la experiencia, porque claramente visitar Site Cocinas, no es simplemente salir a cenar, es entender por donde pasan los sentidos cuando la gastronomía y los vinos son tomados como arte.
