Siete lugares para disfrutar las mejores milanesas de Mendoza

Si bien los argentinos le ponen el sello de propiedad intelectual a la milanesa, la realidad indica que su origen es incierto. Algunos aseguran que se creó en Lombardía, otros en Viena y hasta existe un antecedente en Milán donde se apanaba la carne denominándola escalope. Recién en América Latina tomó la nomenclatura de milanesa […]


Si bien los argentinos le ponen el sello de propiedad intelectual a la milanesa, la realidad indica que su origen es incierto. Algunos aseguran que se creó en Lombardía, otros en Viena y hasta existe un antecedente en Milán donde se apanaba la carne denominándola escalope. Recién en América Latina tomó la nomenclatura de milanesa y Argentina podría acreditarse la versión napolitana. Esto sucedió cuando el dueño de un bodegón porteño llamado José Napoli usó jamón, queso y salsa de tomate para disimular que se le habían pasado de cocción y así creó “la milanesa a lo Nápoli" que con el tiempo mutó en napolitana.


Para muchos existen comidas que nunca superan las manos de mamá o la abuela y entre ellas se encuentra la milanesa. Actualmente la milanesa es una de las comidas más populares y mejor aceptadas del país. Quienes no gustan de arriesgarse mucho ante el menú de un restaurante siempre coinciden en que pedir una milanesa es casi una garantía. Sobre todo porque es un plato confiable y bien conocido. Aunque nunca nos defrauda, existen algunos lugares que superan la expectativa y ofrecen este plato de carne apanada con características Premium.


Al estilo de viejo bodegón con comida netamente casera, visitamos la popular Tía Rada  (Paso de  los Andes 1290 Godoy Cruz), un sitio que ganó fama por la simpleza de su carta cargada de minutas. La recomendación le pone el sello a la milanesa napolitana ($ 140) pensada para compartir. Hechas a la  plancha y sin ajo, salen con salsa de tomate, queso y jamón. Tía Rada es un sitio austero, con la comida que prepararía una madre, y posee excelentes precios. El estilo del lugar claramente descarta atenciones como mantel en las mesas, mientras el aroma a comida puede permanecer.



Cuando hablamos de milanesas nadie podría olvidar a una de las más famosas de Mendoza, las cuales llevan años desafiando a sus comensales. Sobre Ruta 40, llegando al corazón de Tunuyán, El Gallego (San Martín 1575, Tunuyán) lleva años ofreciendo milanesas exquisitas. Tanto es así que hasta ha sido convocada para el libro Guiness. La milanesa gigante tiene el tamaño de una fuente ($ 135) y rinde para tres personas. Frita y luego horneada. Salsa bien sazonada y queso, sin jamón pero con una mayonesa casera que le da un toque propio con un sabor inigualable.



El Club de la Milanesa es una franquicia que tiene locales en varias provincias argentinas y en Mendoza cuenta con dos, uno en Chacras de Coria (Orsini 70) y otro en La Quinta Sección (Av. Arístides Villanueva 405). Tal como su nombre lo indica son maestros milaneseros que ofrecen una variada propuesta en milanesas de carne o pollo acompañadas de ensaladas, puré, papas fritas o papás asesinas. En este lugar, lo que parece una sencilla carne apanada se convierte en un plato gourmet. Poseen 22 variedad de napolitana que suma toppings como cebolla acaramelizadas, fondue de quesos, guacamole, queso brie, provolone, ahumados, huevos fritos y pancetas entre otros. Se pueden pedir en tres tamaños: médium ($ 160 a $ 180), large ($ 300 a $394) y Xlargue ($ 430 a $ 489) para una, dos y tres personas respectivamente. También está la opción de degustación de milanesas con siete pecetos apanados que tiene diferentes toppings ($ 400 para tres) y se sirve en una laja.



En la búsqueda, pedimos milanesas en Patricias (Patricias Mendocinas 886), un pequeña fonda sencilla que siempre sorprende con calidad y excelentes platos. La milanesa a la napolitana es de carne de peceto con doble apanado por lo que es sumamente crocante a pesar de ser al horno. Lleva tomate perita en rodajas, jamón natural y queso mantecoso más oliva y orégano y viene acompañada de ensaladas ($ 150). La milanesa de pollo puede venir con guarnición de fideos caseros a la manteca ($ 120) y es una verdadera recomendación.



La Marchigiana (Patricias Mendocinas 1550) propone en su carta una milanesa de lomo liso con un apanado liviano y crocante. Si bien es grande, no es para compartir y puede salir simple ($ 224) o napolitana ($ 239) la cual lleva salsa de tomate casera y queso mozarella. El comensal puede elegir si la prefiere frita o al horno.



La fuente de milanesas en la mesa, donde cada uno pincha la que más le gusta, se puede revivir en Fuente y Fonda (Montevideo 675). Las opciones son milanesas de nalga y suprema de pollo apanadas con ajo fresco, perejil, ají molido y huevo selladas en la freidora y luego al horno. Llevan jamón cocido y quesos mozzarella y mantecoso (salen gratinados). La modalidad de esta fonda es la fuente para compartir, comen dos o tres personas acompañadas de tortilla de papa y ensaladas fresca ($ 490 de carne y $ 448 de pollo).



Cantina Las Patricias (Paso de los Andes 147) es un restó que busca retomar las raíces patrióticas y realza el sentimiento cuyano con gloriosas frases del General San Martín. Este muy buen espacio ofrece en su carta la milanesa a la napolitana que tiene la particularidad de llevar dos quesos mozzarella y queso azul además de salsa de tomate casera. Sale en una tabla de madera con papas y el comensal tiene opciones entre al horno o frita e individual ($ 175) o compartida ($ 310). Es sabrosa y tierna, con bastante jamón y queso por encima.



La milanesa es un plato inigualable, que siempre conquista adeptos y pese a sus variaciones es básicamente predecible y seguramente sustanciosa. En esta nota te sugerimos muchos lugares de Mendoza, ahora sólo tenés que empezar a disfrutarlas.


 


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Por Carla Luna


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