Te invitamos a comer los mejores lomos de Mendoza…

El lomo es tan argentino como el asado. De hecho, aunque suene a un cliché de argentinidad, lo cierto es en ningún lugar del mundo se prepara este sándwich de carne, denominado  lomo, con las características con las que se hace en nuestro país. En las décadas del 70’ y el 80’ en Mendoza, la […]


El lomo es tan argentino como el asado. De hecho, aunque suene a un cliché de argentinidad, lo cierto es en ningún lugar del mundo se prepara este sándwich de carne, denominado  lomo, con las características con las que se hace en nuestro país. En las décadas del 70’ y el 80’ en Mendoza, la Panamericana era el punto de encuentro donde los jóvenes llegaban a buscar el mejor carrito de lomos. Con los años los fanáticos no cesaron, pero si fueron cambiando sus formas.


Determinar los mejores sándwiches de lomo de la provincia podría resultar una gran polémica.  Sobre todo porque es casi imposible consensuar con las diferentes personas que viven en distintas zonas, ya que cada uno tiene la mejor lomitería cerca de casa.


Asimismo, los conceptos cambian y la  propuesta varía ampliamente desde lomiterías clásicas a nuevos grils que ofrecen sándwich de vacío, entraña y hasta achuras a la parrilla con un perfil más gourmet. A esto se suman hoteles que se animan a competir en un tipo de gastronomía que no era habitual en ellos. Por supuesto que cada cual con su público, sus precios, cualidades y  defectos.


Hay sitios que construyeron por años el mito del templo del lomo como Barloa y Don Claudio. Ambos, pese a los años y a los percances sufridos, siguen formando parte del folklore popular y permanecen en el inconsciente colectivo como referentes. Barloa, el reducto lasherino más popular en la lomitería mendocina es reconocido por su extrema sencillez y se caracteriza por  ofrecer unos  de los mejores lomos a mitad. Este sitio de perfil totalmente popular es buscado por famosos que llegan detrás de un mito urbano, pero ciertamente tiene algo especial. Algunos dicen que es la mayonesa casera, otros piensan que el secreto está en el lugar. El espacio ofrece un comedor desaliñado, frío y austero con mesas de lata y una churrasquera expuesta casi en la puerta de donde salen los platos. ($ 70 el lomo- Juan Pablo Morales 5539, Las Heras Te 0261 368-0694).


Don Claudio comenzó a funcionar como un carrito en los años 70’ y se planta como una de las más tradicionales sandwicherías de Mendoza  A pocos pasos de Arístides Villanueva emplaza su salón que si bien fue modernizado por la segunda generación que tomó el lugar, sigue siendo un espacio sencillo pero con un lomo en pan francés exquisito que permaneció por muchos años entre los favoritos de los mendocinos ($ 95 el lomo- Tiburcio Benegas 744 Ciudad de Mendoza Te. 423-8784). Más moderno y con una estética atractiva, La Lucía conquistó a los jóvenes sobre Arístides y casi Olascoaga. Este lugar ha sabido mutar según el público y guarda un lomo con verduras azadas que está presente en los mendocinos como uno de los mejores del mercado ($ 170-  Aristides 290 Te. 4205286)


Detectando el mercado y modernizando conceptos, algunas parrilladas le dieron una vuelta de tuerca a la carne al asador y lo combinaron con el placer del sándwich. De esta manera algunos grils comenzaron a utilizar diversos cortes de vacuno asados a las brasas y en sándwich, emparentándolos con los lomos. Todos resaltan el valor del corte ya sea de entraña, vacio o achuras como la molleja. Asadito, Anastacio y Torito ubicados todos sobre calle Juan B Justo de la Ciudad de Mendoza incitan con sus fuegos y ofrecen lomos gourmet.


El Asadito que tiene la opción de vacio, entraña, lomo o matambre de cerdo, todos excelentes ($ 135 Juan B. Justo 512 Te.2058580). Torito ofrece un sándwich de molleja que suma tomates secos caramelizados ($ 190) que es uno de los mejores del mercado. Al igual que el lomo de vacuno con sala criolla, panceta, queso y huevo ($ 170) o el de carne de lomo, salsa criolla, queso, chimichurri y pan elaborado por ellos mismo ($ 140). Torito es un lugar para visitar porque cuenta con espacios cálidos y bien ambientados para disfrutar un buen rato (Juan B Justo 234- Te. 4233394).


En este rubro, no se pueden descartar los delivery porque los mejores lomos se hacen a puerta cerrada y llegan a casa cuando ya estamos en pantuflas o con amigos recluidos en el hogar. Si hablamos de lomos tradicionales, cada departamento esconde un sitio donde yacen los mejores lomos de la zona. En Maipú, El Rastro ubicado frente a la plaza departamental, es uno de los preferidos. En las afueras, una lona ampara del frío pero igual un salón sencillo ofrece una gran atención que incita a quedarse. El lomo en pan árabe tiene una carne delgada y blanda, aunque con poco sabor ($ 130). El Aro, ubicado en la Calle Hellen Keller de Guaymallén, ofrece uno de los mejores. Más grande que los tradicionales, en un pan chato con carne tierna y una mistura de condimentos que se entremezclan con el queso provolone ($ 150- Te. 4263330). Su inconveniente es que el delivery no es muy confiable y puede demorar mucho la espera. En Luján recomendaron Lo del Dante y allá fuimos. Una esquina simple y sesentona que alberga la cantina donde el lomo responde a buena carne, pan chato y un huevo en su punto justo ($ 130/ Te. 424-8213) En Godoy Cruz, La Hacienda (sobre Calle Marcelo T Alvear) es uno de los favoritos para ir en familia y con niños ya que tiene mucho espacio para la recreación, pero sus lomos no figuran entre los predilectos. Caso contrario es el de La Campana, la rotisería ubicada en calle Belgrano 77 es una de los favoritos en gastronomía en general y sus lomos son tradicionales sin demasiados pruritos, pero exquisitos. Saliendo del Gran Mendoza recomendamos Ya ce en Tunuyán, uno de los sitios donde el lomo logró las cinco estrellas. Su tamaño tranquilamente permite compartir y sale de los tradicional porque su pan es tan chato que parece una tostada y lleva queso mantecoso que al mezclarse con las salsas generan una crema untuosa que lo hacen complemente diferente ($ 180 con bebida- Ruta 40Km 78 Tunuyán- Te. 02622 42-4311).


 


Por Carla Luna


 


 


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