Alejandro Malgor: “Creemos que existe otra forma de emprender, comprometida con lo social y el medioambiente”
Por Andrea
Calderón
-Estudiaste diseño gráfico, viviste
en Buenos Aires y México, ¿qué te dio esa movilidad y qué encontraste en esos
lugares?
-Mi carrera
estaba mucho más desarrollada en Buenos Aires y me tentaba la posibilidad de
hacer algo distinto en otro lugar y salir de la comodidad diaria. Viví allá
cuatro años y una vez recibido trabajé un año en México, en Guadalajara. Fue
buenísima esa experiencia. Creo que esos lugares me dieron la inquietud de
salir a buscar las cosas sin esperar a que te lleguen y de cambiar lo que no te
gusta.
-¿En qué otros emprendimientos
trabajaste antes de crear la marca de zapatillas sustentables Xinca, junto a
Nazareno El Hom y Ezequiel Gatti?
-Tuve una
marca de remeras de diseño, Liquen, y traje un deporte que ahora en Estados
Unidos y otras ciudades del mundo es furor y que se llama futgolf, que mezcla
fútbol y golf. Además sigo haciendo en Mendoza eventos para empresas.
-¿Cuándo te orientaste por lo
sustentable?
-En un
momento ayudé desde el diseño a Conin y cuando escuchaba a Abel Albino hablar
me rompía la cabeza y surgían las ganas de ayudar y hacer algo. En 2013, un
chico que jugaba al rugby en Los Pumas y que es amigo nuestro, Eusebio Guiñazú,
nos reunió para crear una organización puente con el objetivo de resolver un
problema social. Ahí nos dimos cuenta que queríamos generar oportunidades de
trabajo y también de la fragilidad de muchas organizaciones sociales. Fue
entonces que llegamos a las empresas de impacto o empresas B, que además del
rédito económico, se interesan por lo social y ambiental. La idea entonces fue
ver el modo de generar dinero y satisfacer nuestra necesidad de ayudar y cuidar
el medio ambiente.
-¿Qué pasó entonces?
-El deporte
y la vida al aire libre tienen que ver con nosotros. Por otro lado, nos
interesó estudiar las problemáticas ligadas a lo medioambiental en Argentina y
así fue como con la ayuda de un referente del tema nos enteramos que el
problema de los neumáticos era muy grande. Pensamos entonces en un producto que
mientras más gente lo usara más pudiéramos reciclar. Durante un año y un largo
proceso pensamos en hacer zapatillas y en cómo materializarlas. Finalmente nos
entregaron un aserrín de neumáticos y a partir de ahí comenzó todo. Al mes de fabricar
nuestras primeras zapatillas, un mendocino que trabajaba en la productora
Endemol nos contó que haría un programa de emprendedores y que necesitaba un
proyecto como el nuestro, sociomedioambiental. Así fue como después de negarnos
entendimos que era una gran oportunidad, por el dinero y por compartir con el
público otra forma de hacer negocios.
-¿Qué es Xinca?
-Una marca
de calzado que trabaja con materiales reciclados y que persigue el triple
impacto: el económico, el social y el ambiental. La base de nuestro calzado
está realizada con caucho de neumático, que en la Argentina es muy contaminante
y que muchas veces no se sabe qué hacer con él. Sumado a eso en el proceso
productivo trabajamos con personas que tienen alguna dificultad física o mental
y que muchas veces encuentran obstáculos a la hora de encontrar trabajo. Asimismo
para la capellada, que es la parte superior del calzado, reciclamos y
reutilizamos telas que si no van a parar a la basura. En nuestra página web
pueden verse los modelos disponibles y los puntos de venta donde pueden ser
comprados nuestros productos. Creemos que existe una forma de emprender y de
hacer negocios con compromiso ambiental y pensando en el otro. La idea desde
siempre fue que fuera una zapatilla para todos y no para pocos por eso buscamos
el modo de que fueran accesibles, a pesar de que los costos no son económicos.
-¿De dónde viene tu espíritu
emprendedor?
-Mi mamá es
artista y mi papá es contador, dos extremos. No sé, supongo que de la idea de
querer trabajar para mí y de hacer lo que me gusta. También de las ganas de
hacer algo en equipo porque siempre la mirada del otro contribuye para llevar
adelante la tarea.
-¿Qué entendés vos por consumo
responsable?
-Se habla
mucho del tema y no es algo que se dé de un día para el otro. En mi caso
intento estudiar las marcas antes de consumirlas, indagar en el trasfondo y las
condiciones de trabajo de sus empleados. Hoy hay un montón de marcas nobles que
buscan generar menos daño y a diario se puede ser responsable cuidando el agua
o el consumo de energía, por ejemplo. A veces nos pasa que la gente habla mucho
de lo que hacemos y nos felicita pero a la hora de comprar eligen otra marca
que además de contaminar es mucho más cara. Me informo mucho sobre el tema y la
incorporación de hábitos es progresiva. El objetivo es poner en igualdad lo que
uno dice de lo que hace.
-¿Cuál te parece que es el desafío en
Mendoza en lo que refiere a sustentabilidad?
-Algo bueno
que pasó este año con el nuevo gobierno es que se creó un área de
sustentabilidad y esto es importante: que temas como éste se incorporen a la
agenda política.
-¿En qué proyectos trabajan
actualmente en Xinca?
-Hoy
trabajamos en una nueva problemática social y apunta a contribuir a bajar la
tasa de reincidencia por delito. Estudiamos el tema y entendimos que muchas de
las personas que ingresan a la cárcel encuentran luego dificultades para
integrarse a la sociedad. Esta falta de oportunidades nos llevó a pensar en
ellos para que trabajen, sepan del esfuerzo que implica y a partir de ahí
ofrecerles herramientas. En ese sentido estamos trabajando fuerte en
capacitarlos para construir calzado de calidad dentro de la cárcel y que luego,
una vez en libertad, sigan vinculados. También la idea es exportar; hemos
avanzado en España y en Australia con la posibilidad de meternos también en
Estados Unidos.
PING - PONG
¿Un restaurante? La Marchigiana
¿Una comida? Lasagna
¿Un vino? Tinto. Puede ser de Dolium o de Maal Wines
¿Signo del zodíaco? Capricornio
¿Hincha de…? Racing
¿Programa favorito de TV? House of Cards
Una marca de ropa: Patagonia Inc
¿Quién era tu ídolo cuándo eras chico? El Chavo.
¿Facebook, Instagram o Twitter? Prefiero Airbnb
¿Un destino de vacaciones? Brasil.