Los infalibles del chef: hoy, Nico Bedorrou
Aunque Nicolás Bedorrou no es mendocino, es uno de los chefs locales más conocidos del medio. Sobre todo gracias a su paso por diferentes programas de la pantalla chica. Puede estar preparando una receta en vivo o entrevistando a los dueños de un clásico bodegón, pero su estilo (que recuerda al del popular Lele, de Café San Juan) es relajado y cálido.
Su incursión en televisión comenzó hace más diez años junto al recordado Nicola del Papa, y motivado por un afán de comunicar de qué manera podemos comer mejor sin ser expertos en la cocina.
A su tiempo frente a las cámaras, se le suma la dirección de su propio servicio de catering, llamado Los Olivos. Debido al fanatismo que siente por ese ingrediente cuenta también con el proyecto de Aceite de Oliva y Aceto Balsámico El Conquistador. Y a todo esto suma dos restaurantes propios: Dos de Azúcar y El Porvenir. Cabe destacar que el primero, ya abrió su primera franquicia en el microcentro.
Ya sea que esté asando un costillar para un casamiento, preparando un delicioso brunch o una cena bien argentina, Bedorrou se caracteriza por ofrecer propuestas que quedan en el recuerdo de quien las prueba. En esta nota, High sale a descubrir algunos de los elementos que no pueden faltar en la cocina del popular chef.
Un condimento que no te puede faltar: jugo de limón, porque levanta todo.
Una guarnición que va con todo: papas cascadas, primero hervidas y después fritas.
Tu pasta favorita: ravioles de chivo o cordero con una manteca de hierbas.
El mejor método de cocción: el fuego, seguido por el vacío. Uno es el más antiguo y otro, el más moderno.
Un referente: de la actualidad, elijo a los hermanos Roca y a David Muñoz.
Un disco para escuchar cuando cocinás: “In Between Dreams”, de Jack Johnson. Lo podés escuchar todo el día y no te cansa.
Un cocktail: Cinzano con pomelo.
El plato que más sale en tu restaurante: definitivamente, la tapa de asado de larga cocción acompañada de puré de papas y gremolata.
Un placer culposo: no siento culpa nunca con la comida. ¡Tengo esa bendición! (risas)
El postre que siempre pedís: flan y mousse de chocolate. Cada uno la hace distinta y es un postre que me encanta, siempre que el chocolate sea bueno.
Un vino: Gran Guarda de Bodega Sin Fin, Pulenta Estate Gran Corte y Concreto de Zuccardi Valle de Uco. Elijo estos por nombrar algunos, porque en Mendoza es muy difícil elegir uno solo.
¿A dónde te gusta ir a comer?: a lugares muy simples, pero cálidos como La cantina del Oso, en Maipú. También me gustan mucho Brindillas y La Casa del Visitante.
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Por Florencia Manzur
