Rogelio, el restó a puertas cerradas
Un enorme portón de metal con la letra inicial en dorado se ilumina al correrse y dejar a la vista el ingreso de Rogelio (Renato Zanzin 1458 Godoy Cruz Te. 427-3189). Este restó a puertas cerradas ofrece intimidad, calidez y la sensación de estar en casa. Mónica sale hasta la puerta a buscar a sus comensales para recibirlos en la recepción con una copa de jerez o manzanilla y comenzar a transitar la experiencia que propone junto a su esposo Javier Figueroa. "Rogelio" es un restaurante para dos públicos. Por un lado para quienes quieran tener una experiencia especial de una comida auténtica mediterránea - española y por otro para quienes disfrutan de la cultura del buen comer.
El lugar. Una casa antigua de estilo colonial que rememora una vivienda sevillanas. Posee mayólicas, arañas de hierro, un portal de dos hojas y paredes vibrantes las cuales sostienen una exquisita muestra de arte. La decoración del lugar no deja nada librado al azar. El piso cual juego de damas y las mesas vestidas con vajillas de plata dan cuenta de un restó con varias estrellas. La iluminación está pensada para respetar la intimidad y brindar calidez. Un patio al estilo andaluz, con cientos de macetas que sostienen pequeños malvones, y la galería con sillones españoles de hierro alientan la imaginación de viajar sin ir salir de Mendoza.
¿Qué comer? Con un poco de sangre española y otro de haber vivido la cultura sevillana, Javier se entrenó en gastronomía mientras estudiaba su maestría en leyes en Andalucía. Esto habla de la fuerte influencia que recibió de aquella región española. La carta no es muy extensa y casi sin verla se puede pedir una tortilla de papas que tiene una consistencia babé exacta. Tiene solo nueve principales pero todos con gran protagonismo. Encabeza la lista, siendo uno de los más elegidos, el Rabo a la Andaluza ($460). Se trata del rabo del toro, el cual se cocina en esta época cuando se hacen las corridas taurinas. Su consistencia es tan tierna que se desarma con el tenedor. El pulpo a la gallega sabe a Galicia. Es tierno y con la textura que corresponde. Este producto importado de España es una apuesta grande para la provincia. Sabroso rico bien hecho y estéticamente bien presentado. Otro de los platos de autor de espacio es el Salmón Monterrosa ($500). Es un salmón salteado a la plancha con pimentón picante de la vera, almendras tostadas salsa de morrones y salsa de ciboulette. Todo esto acompañado de risoto negro de tinta de calamar.
En "Rogelio" no se escatima en detalles. Es por esto que se utilizan productos originarios como el pimentón ahumado de la vera, aceite de oliva, el azafrán español y demás especias de la península ibérica.
Tips diferenciadores. Dentro de la experiencia hay un espacio montado con sonido, tres guitarras y un piano donde la música tiene un fuerte protagonismo. Si bien no es un restaurante con show, este puede darse de manera espontánea. Es decir quien llega y quiere compartir su arte puede hacerlo. Es un espacio donde la música se da de la maniera menos premeditada. Además cuando termina la cena, la recepción invita con un licor de mandarina o grapa para cerrar la noche
¿Porque ir? El comensal tiene la libertad de ir a la cava y elegir el vino. La cava forma parte del espacio libre del restaurante y de las cosas que hacen que la gente se sienta como en casa. De hecho, se puede comer un sándwich de jamón crudo y tomar un vino en al cava. O salir a la terraza y disfrutar del espacio con un postre. El objetivo es brindar libertad absoluta a los comensales.
"Rogelio" Es un restaurante donde la calidad y la calidez son prioridades. El espacio cuenta con una atención de mozos preparados para el servicio, platos suntuosos y sabrosos y un ambiente que nos traslada a un viaje por Andalucía mientras sentimos la comodidad del hogar.
Si querés conocer más lugares destacados de Mendoza, hacé click acá.
Por Carla Luna